viernes, 10 de febrero de 2012

Este es Colton


Con la primera página de este cómic inauguro el blog que irá albergando las venideras hojas llenas de viñetas sobre el increíble héroe del viejo oeste, Colton White.

La historia viene de lejos, ya añeja, aunque no se si mejora como los vinos. El guión/dibujo/idea original viene del año 2006. En ese momento yo estaba cursando 4º de ESO junto con mi gran amigo Pablo Peralta. Fue una época llena de aventuras y gestas heroicas que merecen estar pintadas sobre tapices de lana gorda en las paredes de un magnífico castillo, pero lo que viene al caso, es que en vez de atender en clase, nos dedicábamos a dibujar.

Dibujábamos mil y una estupideces que por aquel entonces se nos pasaban por la cabeza. Inspiración que  no nos hacía falta porque teníamos ya de sobra para regalar en formato de hojas de cuadros llenas de garabatos.
Otra cosa que nos gustaba especialmente era jugar a videojuegos: las tardes de entre semana las pasábamos muertas jugando a tal o cual juego, y en el recreo del instituto también hablábamos sobre ellos.

En aquel momento un nuevo juego despuntaba: GUN. El tema del oeste siempre ha sido poco tratado en ese mundillo, y es algo que a mi me atrae bastante, con lo cual lo compré para mi Game Cube.
Después de que Pablo y yo nos cepilláramos el juego en un par de días, por lo visto, en el momento más aburrido de clase (que es cuando la mente desarrolla las mejores ideas y propuestas, por cierto) se nos ocurrió hacer un cómic de esa temática.

Pero lo único que se parece con el juego es que se sitúa en el oeste y el protagonista se llama Colton White. Porque el guión no tiene absolutamente nada que ver, y el dibujo menos todavía. Cualquier similitud con el juego real es pura coincidencia. Por lo tanto, querido lector, no intente buscarle ningún tipo de analogía con el juego de neversoft.

Seis años después, que se dice pronto, desempolvo mi vieja carpeta del instituto y me reencuentro con estos cómics. Me hacen gracia: los dibujos son estúpidos y los chistes más aún. Ahí estaba la cuestión, humor estúpido que nos hacía gracia en aquella época.
Tiempo ha pasado y sigo siendo manco dibujando, porque no he perfeccionado mi técnica, pero me regalaron una tableta gráfica wacom por mi cumpleaños el año pasado y me dije: "¿por qué no escaneo los cómics y los redibujo con la wacom?"
Trabajando con Photoshop para "restaurar" el cómic original.
Y como no tengo otra cosa que hacer (esa es otra cuestión), me puse a ello. En total hay cuatro hojas de cómic, son hojas de cuadros de las que nos daban en el instituto, rellenadas a boli con dibujos hechos en pocos segundos y viñetas sin regla y a bulto. La cosa iba así: no había guión, simplemente uno dibujaba una viñeta y le pasaba la hoja al otro, y así to el rato. Íbamos construyendo la historia sobre la marcha.

Todo eso explica por qué hay dibujos tan feos (aparte de porque como digo, no me considero un buen dibujante), y muchas viñetas no cuadran mucho, o son muy caóticas, o hay cosas que no tienen sentido alguno... Pero bueno, el caso es que aquí está. Y estoy decidido a continuar con las demás hojas... y cuando acaba continuaré la historia junto con Pablo, con quien ya me he puesto en contacto para ello.

3 comentarios:

  1. Muy buena, que recuerdos me trae este cómic, la verdad que fue una época bastante buena y en la que dibujábamos TODO lo que se nos ocurriese, buscaré la agenda en la que comenzamos a dibujarlo antes de hacerlo comic. ¡Buen trabajo!

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    1. Yo he encontrado en una viñeta una firma que hice en su día, y pone "Carlos 2005", así que no es del curso del 2006 como suponía, sino más antiguo aún.
      Así que imagínate... Ya sabes, cuando vayas a venir a Almería, avísame y quedamos para continuar la historia. ;)

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    2. Bajaré el finde que viene me parece y buscaré esas cosas, la historia abrá que mantenerla igual de espectacular

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